XVI Encuentro Internacional de Partidos Comunistas y Obreros (EIPCO), Guayaquil 13-15 noviembre, 2014 
Contribución del Camarada Vinnie Molina, Presidente del Partido Comunista de Australia
"El papel de los partidos comunistas y obreros en la lucha contra la explotación
imperialista y capitalista que causa crisis y guerras y da lugar a fuerzas fascistas y
reaccionarias. Por los trabajadores y los derechos de los pueblos, por la emancipación
nacional y social; por el socialismo!"
Antes de comenzar mis comentarios sobre nuestro tema me gustaría dar las gracias y
felicitar al Partido Comunista del Ecuador por acoger esta décimo sexta Reunión
Internacional de Partidos Comunistas y Obreros. Me siento orgulloso de ser miembro de la
clase trabajadora australiana, de tener un origen latinoamericano y de haber asumido un
papel de liderazgo en el Partido Comunista de Australia. Cambios radicales han tenido
lugar en América Latina en la última década y media. Cómo caracterizar estos cambios es
objeto de cierto debate e incluso polémica en nuestro movimiento, pero es innegable que
los cambios profundos, progresistas que han tenido lugar demandan nuestra atención y
respeto. Esos cambios están inspirando a millones de personas alrededor del mundo. Es
beneficioso para nosotros que vivimos fuera del área venir a conocer y aumentar nuestro
entendimiento de estos procesos.
De hecho, la consolidación de los cambios de orientación socialista en América Latina es
uno de los pocos puntos brillantes en la escena política internacional al tiempo de nuestra
reunión. La crisis económica y las demandas de los gobiernos capitalistas y las
instituciones financieras supranacionales han impuesto mas sufrimientos a los trabajadores
y demás explotados. Nuevas olas de privatizaciones se están produciendo a manera que el
estado nacional burgués continúa a buen ritmo con su traspaso de funciones y activos a las
empresas transnacionales. Los sindicatos son perseguidos, exprimidos de los lugares de
trabajo y paralizados por leyes represivas. La "lucha contra el terrorismo" es la excusa dada
para incrementar la vigilancia y recopilación de datos de las personas y para eliminar
derechos democráticos ante la ley.
El imperialismo estadounidense está poniendo en marcha nuevas guerras y guerras de
poder con sus aliados habituales. La política militar norteamericana del “Pivote” o de
“reequilibrio” para la región de Asia-Pacífico y Océano Índico -en preparación para la
agresión contra la República Popular China-está cobrando fuerza. Los brutales bloqueos
económicos y diplomáticos contra Cuba y la República Popular Democrática de Corea se
mantienen en su lugar. La guerra ideológica contra el socialismo y partidos comunistas no
se modera, al contrario se incrementa. Y mientras que los países más pobres luchan contra
los efectos del cambio climático, los gobiernos de las economías desarrolladas se niegan a
tomar las medidas necesarias para evitar una calamidad ambiental.
El fascismo y la guerra
Desafortunadamente, los nuevos elementos de la escena internacional son en su mayoría
negativos. El fascismo está en aumento. Hemos visto ganancias electorales de Jobbik en
Hungría, el Frente Nacional en Francia y del antiinmigrante UKIP (Partido por la
independencia del Reino Unido) en Gran Bretaña, para dar sólo algunos ejemplos. La peor
de todas fue el papel de liderazgo de grupos neonazi en el golpe de Estado contra el
gobierno de Ucrania y las consecuencias reaccionarias que han fluido de ello.
La situación en Ucrania lleva graves peligros para el mundo entero. Los planes de los
Estados Unidos y la OTAN de avanzar mas hacia el Este ha alcanzado un hito importante.
La batalla se libra ahora en función de colocar sus fuerzas y equipo militar de alta
tecnología en la frontera con la Federación de Rusa, en preparación de su objetivo final - la
ruptura de esa entidad y el acceso sin restricciones a sus recursos-.
Al mismo tiempo, los Estados Unidos persiguen objetivos en Medio Oriente a través de los
medios más cínicos. No es la primera vez que el imperialismo norteamericano ha creado y
armado a fuerzas que ahora dice que debe intervenir para derrotar. El Estado Islámico es el
último de tal fenómeno. El cambio de régimen en Siria es claramente un objetivo de mayor
importancia, pero se persigue además un rediseño fundamental del mapa de Oriente Medio.
Las aspiraciones nacionales de los pueblos de la región no están detrás de la última
intervención de las fuerzas militares, entre ellas las de Australia. La continua ocupación y
el tormento del pueblo palestino es prueba de ello. Así también los cambios que se
persiguen para un mayor acceso a los recursos de la región y los intereses estratégicos del
gobierno sionista de Israel.
En el Mar del Sur de China notamos tensiones, incluso entre países socialistas hermanos
sobre territorios y vemos la astucia de los imperialistas estadounidenses en tomar ventaja
de la situación. Vemos las mismas fuerzas reaccionarias trabajando en los eventos en Hong
Kong.
Infortunadamente, en este momento de extremo peligro para la paz en el mundo la
respuesta del movimiento contra la guerra a nivel internacional ha sido lamentablemente
inadecuada. En muchas partes del mundo ha perdido mucho de su antiguo vigor. En
Australia esto parece ser en parte el resultado de la derrota de su movilización masiva
contra la invasión de Irak en 2003. El reagrupamiento y la revitalización del movimiento
contra la guerra debe ser una prioridad para el movimiento comunista internacional en este
momento. Solidaridad con las víctimas de esta agresión militar, incluidas las nuevas
oleadas de refugiados a las costas de países como Australia, también debe ser una
prioridad.
Un mundo multipolar
Por supuesto, debido a su naturaleza intrínseca, el imperialismo siempre va a encontrar
resistencia. A condición de que no destruya el planeta primero, su derrota es segura.
Incluso en las peores circunstancias, la gente va luchar. En Colombia la lucha decidida del
pueblo, incluyendo la lucha armada, parece estar al borde de algún avance en las
conversaciones de paz que tienen lugar en La Habana, Cuba. En Grecia, los trabajadores
liderados por PAME están planeando una huelga nacional para finales del mes. Ya he
mencionado los cambios progresistas que han sacado a millones de la pobreza en
Latinoamérica y el proceso de integración que tiene lugar sobre la base del beneficio
mutuo. Estos procesos que se desarrollan en la región nos alientan mucho.
Ya el imperialismo estadounidense no tiene la carta blanca que tenía en el período
inmediatamente posterior a la destrucción de la Unión Soviética. Más y más países están
comenzando a cuestionar las bases sobre las que se erigió la economía mundial después de
la 2 ª Guerra Mundial y la posición privilegiada de los EE.UU. dentro de ella. Libia estaba
persiguiendo una moneda africana de comercio respaldada con oro antes de la intervención
de la OTAN. Otros países están optando por monedas distintas al dólar estadounidense
para el comercio de mercancías como el petróleo. Quizás lo más notable es el creciente
comercio entre China y la Federación Rusa en sus propias monedas y la construcción de
infraestructura para expandir masivamente ese comercio.
Esto no es una cuestión de indiferencia para los pueblos del mundo. Mientras que
entidades como BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica), están compuestos por
países en diferentes etapas de desarrollo económico y con diferentes sistemas sociales
como China socialista; el surgimiento de un bloque de este tipo es un desarrollo progresista
para la gente del mundo. Se debilita el control del imperialismo sobre esas economías y los
ataques de los Estados Unidos y sus aliados a la soberanía de esos países. No es un "mal
menor" entre bloques imperialistas rivales. Es un desarrollo positivo en los asuntos
internacionales. Es un ejemplo para otros países que enfurece a los imperialistas
norteamericanos por lo que este conspira contra ellos día y noche.
Los Estados Unidos actúan para evitar este tipo de iniciativas. Está presionando a los
países a no unirse al banco de desarrollo regional respaldado por China. Está presionando
además por la finalización del tratado de libre comercio del área del pacifico conocido
como TTP así como otros pactos, lo que dejaría a los gobiernos con menos poder de
legislar en protección de sus ciudadanos de la depredación por parte de las corporaciones
transnacionales. La gente progresista debería apoyar el crecimiento de alternativas al
imperialismo dominado por Estados Unidos, como BRICS y ALBA (Alternativa
Bolivariana para las Américas).
Australia y nuestra región
El escenario político en Australia refleja la situación internacional en la que el
imperialismo norteamericano lucha agresivamente por mantener su hegemonía. El
gobierno de Coalición (conservador) encabezado por el primer ministro, Tony Abbott está
llevando a cabo una agenda mucho más reaccionaria que su predecesor social demócrata
del Partido Laborista. En conjunción con sus homólogos de los gobiernos estatales, está
recortando el gasto en servicios públicos y eliminando miles de puestos de trabajo del
sector estatal. Se privatizan los pocos activos que quedan en manos del estado.
Las líneas entre la provisión pública y privada de servicios de salud y educación siguen
siendo borrosas con el objetivo de destruir finalmente el sistema público en general, pero
en especial para los más necesitados. Incremento al regresivo impuesto sobre bienes y
servicios (GST) está siendo forzado para que los estados puedan cumplir con sus déficits
financieros. Los costos de la educación terciaria y la deuda estudiantil se incrementan a
medida que las universidades son de-reguladas. Degradantes programas de seguridad
social -sin dinero en efectivo-están siendo implementados, los sistemas de indemnización
de los trabajadores cambiaron para que estos regresen de vuelta al trabajo más rápido
aunque estén enfermos. Los derechos de los pueblos originarios a la tierra están siendo
atacados para permitir que sus tierras tradicionales sean saqueadas por las transnacionales
mineras.
Una cacería de brujas en contra de los sindicatos se lleva a cabo a través de una Comisión
Especial sobre "gobernabilidad sindical y corrupción". La conducta de ciertos elementos
oportunistas de derecha en algunas dirigencias sindicales ha permitido al gobierno dañar
aún más la imagen de los sindicatos ante la opinión pública. Se ha preparado el terreno
para que grupos especiales de la policía ejerza mayores controles sobre los recursos
propios de los sindicatos. La conexión entre sindicatos y algunos de los fondos más
grandes de ahorro para el retiro se pondrá a prueba. Hay una fuerza policíaca secreta que
opera en las obras de construcción australianas con el objeto de torpedear la organización
sindical y penalizar a los sindicatos y sus miembros si se atreven a organizar o luchar.
Defensa es el único sector del gasto público sin corte presupuestal. Aviones de combate
combinado, destructores de guerra aérea y submarinos están en las carteras de pedidos o
bajo consideración activa. Los Estados Unidos están abriendo nuevas instalaciones de
espionaje en el oeste del país y una nueva base de marines al norte en Darwin. Fuerzas
militares australianas han sido enviadas a bombardear objetivos en Irak y Siria.
Miedo y división son promovidos por el gobierno y los medios de comunicación
corporativos. Las comunidades musulmanas están bajo el ataque de elementos fanáticos y
grupos políticos racistas reclutan fuertemente. Legislación para espiar el uso de celulares e
Internet de los australianos, restringir su movimiento y evitar que hablen acerca de las
acciones encubiertas del gobierno se apresuró en el parlamento con apoyo "bipartidista".
La pena máxima es la cadena perpetua, teniendo a periodistas y denunciantes como los
objetivos principales.
El gobierno federal desecho el impuesto al sector minero. Un pequeño gravamen a un
pequeño número de empresas, que fue incluso considerado inapropiado por las compañías
mineras y el gobierno conservador. De igual forma, el impuesto sobre el carbono que
eximio y compensaba a los mayores contaminantes en el país fue desechado. La temeraria
negación del cambio climático impulsan las políticas del estado. La industria minera tiene
su propio partido populista de derecha en el parlamento -Palmer United Party-que lleva el
nombre del multimillonario de la minería del carbono Clive Palmer que tiene un escaño en
la Cámara Baja.
El papel de los comunistas
El deber de los comunistas frente a todos estos desafíos es el mismo en Australia como en
todo el mundo -resistir y organizar la más amplia alianza de fuerzas posible para resistir
con eficacia. La lista de los ataques y las áreas que requieren luchar de vuelta es larga y el
enemigo es astuto y bien dotado de recursos. Sin embargo, la escala de los ataques contra
los derechos del pueblo ya ha provocado una fuerte reacción. Las mayores marchas vistas
en los últimos tiempos han tenido lugar en las calles de las principales ciudades. Carecen
de conciencia de clase y de sentido de cómo mejorar y ampliar la lucha en contra de las
medidas de austeridad y los despidos, pero fallan al no presentar políticas alternativas. Ese
es el papel de los comunistas en la coyuntura actual.
La ofensiva de la clase capitalista internacional y el imperialismo estadounidense es global.
Las conexiones internacionales de la lucha necesitan hacerse y la mano de la solidaridad
extenderse a las personas que luchan contra el enemigo común. El movimiento comunista
internacional es un lugar lógico para hacer este tipo de vínculos. En algún momento esto
tendrá que ser llevado más allá de las declaraciones conjuntas a las iniciativas más
prácticas. El Partido Comunista de Australia espera poder jugar su parte en dichas tareas.
Hay varias campañas en donde nuestro movimiento podría centrar sus esfuerzos. El caso
de los Cinco héroes cubanos viene inmediatamente a la mente. Nosotros como movimiento
comunista unido podemos asestar un golpe al imperialismo al asegurar la liberación de los
Cinco cubanos. En este tipo de campañas es que podemos añadir a la lucha internacional
contra la ofensiva del capital, y en contra de sus planes para el fascismo y la guerra.
http://www.cpa.org.au/