DEMOCRACIA, PARTICIPACIÓN Y ANTE TODO TRANSPARENCIA

Desde el sector crítico de CCOO-CONFEDERAL, queremos comunicar que lamentamos enormemente los escándalos de corrupción que están surgiendo por parte de integrantes de la cúpula de CCOO. En el caso de la utilización de tarjetas opacas, por parte de los representantes de CCOO en Caja Madrid, decir, que es un grave desprestigio para el sindicato, y que estos casos son una traición a los miles de sindicalistas que lo dan todo cada día en su trabajo, así como un insulto al conjunto de la afiliación.

En nuestra opinión, la Ejecutiva Confederal debe de asumir su responsabilidad, ya que no se puede escurrir el bulto, excusándose en que los culpables lo son a título individual, porque la máxima dirección del sindicato es responsable del papel que ha jugado nuestra representación en Caja Madrid, y en la adopción de decisiones que han tenido gravísimas consecuencias sociales y económicas para la familias trabajadoras (como las preferentes etc.). También han sido coparticipes de las tesis más cercanas al desmantelamiento del modelo de las cajas, y no han establecido mecanismos dentro del sindicato de control alguno sobre los representantes de CCOO en esos consejos de administración, sobre las actividades que realizaban, o sobre las prebendas de las que se beneficiaban.

Y esto el sector crítico en reiteradas ocasiones, pedimos en los órganos de dirección de CCOO que se tomaran medidas, y no solo fuimos desoídos, sino combatidos internamente por ello. Este modelo sindical iniciado por Antonio Gutiérrez, que ha hecho del dialogo social y de la participación institucional las actividades esenciales del sindicato, desatendiendo la movilización sostenida, todo ello en un tiempo en el que la patronal y los gobiernos de turno han aplicado sin tregua recorte tras recorte en los derechos individuales y colectivos de los trabajadores, ha dado cobertura a este tipo de actuaciones que han terminado por implicar a CCOO en el sistema que hoy rechaza una amplia mayoría de trabajadores.

Este modelo sindical ha provocado, además, un progresivo aislamiento con los afiliados y cuadros del sindicato. En estos momentos estamos inmersos en un proceso electoral que hace muy difícil la realización de un Congreso extraordinario, aunque sobren las razones para su convocatoria, pero no podemos ni debemos esperar más tiempo para desarrollar un proceso que permita superar la situación tan grave que vive el sindicato. Se lo debemos a los miles de sindicalistas que día a día pelean en condiciones muy duras por defender los derechos de sus compañeros/as.

Por eso desde el Sector Crítico, exigimos:

 Que, además de la expulsión de los implicados, se asuman las responsabilidades individuales y colectivas, se exija la devolución del dinero defraudado y que CCOO se persone en los procesos judiciales.

 Que se adopten de inmediato, con la participación de la afiliación, todas las medidas que impidan que este tipo de situaciones puedan repetirse.

 Que se realice una auditoría financiera y de gestión que abarque todas las actividades de las organizaciones Confederadas.

Llamamos, por último, al conjunto de los afiliados y cuadros del sindicato a que se impliquen activamente en todas las actuaciones que fortalezcan el sindicato de clase, garanticen la democracia interna, la participación y la máxima transparencia en la actividad sindical. El sindicalismo de clase es, como siempre, imprescindible para la defensa de los intereses de los trabajadores/as.

Por eso, el Sector Crítico llama a la unidad, y a que GANEMOS la batalla por la reconquista de las CCOO.

Desde el Sector Crítico de CCOO-SEAT, hacemos un llamamiento a la afiliación, a que participe de forma activa en las próximas elecciones sindicales del 2015, y a la asamblea de CCOO-SEAT el 15 de Noviembre en CCOO de Cornellá, 9:30h.




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