Un nuevo Golpe a la democracia y a la soberanía popular: prohíben arbitrariamente la candidatura de Fernando Lugo.
El Tribunal Superior de Justicia Electoral (TSJE) del Paraguay, en un claro acto político-ideológico de usurpación de la soberanía popular, dictó una sentencia prohibiendo la candidatura de Fernando Lugo, este pasado viernes (16 de diciembre 2016).
El TSJE es un órgano que carece de competencia para pronunciarse sobre la constitucionalidad de la candidatura de Fernando Lugo, pues es la Corte Suprema de Justicia es la única que puede interpretar la Constitución. Aun así, dictó deliberadamente una decisión aberrante de claro corte político-ideológico de defensa de los intereses de los sectores oligárquicos y golpistas.
Este acto arbitrario, bajo ropaje legal, es una clara persecución político-ideológica desatada por la oligarquía temerosa de sufrir una derrota política del proyecto restauracionista/golpista iniciado en junio del 2012, como ya la sufriera en el 2008.
La sentencia dictada por el TSJE es la muestra de un ensañamiento hacia Fernando Lugo, quien representa, y encarna hoy, el clamor del pueblo a favor del cambio. Tal inconstitucional sentencia es la expresión de la voluntad política de sectores golpistas y oligarcas de impedir, por todos los medios necesarios, la transformación democrática y social que requiere el Paraguay en forma urgente.
Es un nuevo Golpe contra la soberanía popular; un nuevo golpe de usurpación de la voluntad del pueblo, un nuevo golpe preparado contra los pueblos.
Sólo la movilización popular en todo el país y la decisión del único constituyente, el pueblo, podrán parar este acto de prepotencia y barbarie. El único que debe decidir es el pueblo, por consulta popular, como establece la Constitución.
Es imperiosa la solidaridad de los movimientos sociales, políticos y de organizaciones políticas internacionales para impedir el avance de este nuevo Golpe, de un nuevo capítulo del Plan Cóndor, que la derecha regional pretende imponer a los pueblos, y en particular al pueblo paraguayo.
Asunción, 19 de diciembre de 2016
Secretaría de Relaciones Internacionales