En ocasión de cumplirse 34 años de la conformación de la Unidad Revolucionaria Nacional Guatemalteca –URNG-, saludamos a todos los hombres y mujeres que fuimos y somos partícipes en su construcción y acción protagónica en favor de los intereses del Pueblo de Guatemala. Como combatientes y oficiales guerrilleros; dirigentes y activistas políticos; colaboradores y simpatizantes; bases de apoyo y pueblo simpatizante, hemos escrito con letras de lucha, una gloriosa página en la historia de Guatemala. Estamos seguros que cada uno de nosotros, desde diferentes y variados espacios en que nos encontramos, continuamos esa lucha, enriquecida con nuevas y variadas formas, y sobre todo, fortalecida con nuevas generaciones que la asumen.
Aquél 7 de febrero de 1982, las organizaciones revolucionarias, Ejército Guerrillero de los Pobres (EGP), Fuerzas Armadas Rebeldes (FAR), Organización del Pueblo en Armas (ORPA) y Partido Guatemalteco del Trabajo (PGT), unimos en URNG nuestras ilusiones y fuerzas, para enfrentar a un poderoso y sanguinario ejército de la oligarquía, que había decidido aniquilar al Movimiento Revolucionario Guatemalteco y a toda expresión social y política contraria a sus intereses. El exterminio de poblaciones enteras, el genocidio contra pueblos indígenas, y la represión militar y política más sanguinaria conocida en la historia de América Latina después de la invasión española, fue su resultado. Aun así, la lucha no terminó. El Pueblo recuperó fuerzas a través de sus expresiones sociales organizadas quienes, conjuntamente con la acción militar y política de URNG, conquistamos los Acuerdos de Paz en 1996, para abrir un nuevo episodio de la lucha guatemalteca.
Se abrió entonces, el camino para la Paz Firme y Duradera con base en un conjunto de políticas públicas y cambios legislativos, dirigidos a superar las causas históricas y estructurales que dieron origen al conflicto armado interno. A 20 años de aquel esperanzador acontecimiento, la crisis gubernamental y el deterioro de las condiciones de vida de la población en la actualidad, dan cuenta del incumplimiento y abandono de los Acuerdos de Paz por los sucesivos gobiernos de turno y los sectores dominantes detrás de ellos. Sin embargo, la democracia plena, funcional y participativa; el estado pluricultural, multiétnico y multilingüe; y, el ejercicio pleno de los derechos de los Pueblos Indígenas, siguen siendo las metas a lograr conjuntamente, por las expresiones populares, democráticas, progresistas y revolucionarias de nuestra Guatemala.
La revolución guatemalteca sigue siendo una necesidad histórica, en consecuencia, la articulación de los esfuerzos organizativos y políticos revolucionarios, un compromiso irrenunciable; la situación política actual de Guatemala y los intereses económicos y geopolíticos que acechan la soberanía y las riquezas de la Región Centroamericana, Caribeña y latinoamericana, la hacen urgente; la resistencia y lucha histórica de los Pueblos Maya, Xinka, Garífuna nos marcan el camino; y, la indignación, repudio y generalización de las protestas contra la corrupción e impunidad, reviven las esperanzas y reactivan las fuerzas hacia la consecución de los cambios sustantivos comprometidos en los Acuerdos de Paz.
En este aniversario de URNG, comprometemos de nuevo lo mejor de nuestros esfuerzos a la lucha por los intereses de Guatemala y sus Pueblos. En consecuencia, unimos esfuerzos con las distintas expresiones políticas y sociales que demandan hoy, fin a la corrupción y la impunidad, reformas profundas al Estado, y políticas públicas dirigidas a atender las demandas sociales, frente a la voracidad de las empresas nacionales y transnacionales que se apropian y se enriquecen de los bienes y recursos del Estado.
¡Honor y gloria a nuestros mártires y héroes!
¡Viva la resistencia y lucha de los Pueblos Indígenas!
¡Viva la lucha revolucionaria, democrática y popular de Guatemala!
¡VIVA URNG MAIZ!
Guatemala, 7 de febrero de 2016
Página web: www.urng-maiz.org.gt
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